Como me lance a ese beso que me está mirando,
a través de tu boca,
nos va a faltar calendario,
y nos va a sobrar la ropa.
No te muerdas así el labio,
que no me contengo,
que me arrojo a tu deseo,
y te lo despeino.
No me mires de esa forma,
no me tientes,
que te arranco las virtudes,
con los dientes.
Tengo un poema guardado
entre los dedos,
que hará rimar tus caderas,
con mi fuego.
No sonrías, me conozco,
esa mueca juguetona,
me vuelve loco.
Deja que vuelque mis ganas
sobre tu cuerpo,
que ya veremos maňana,
si nos queremos.
Deja que desvista tu alma,
que te alborote la piel,
que tengo un par de caricias,
que te van a estremecer.
Que te desnude el aliento,
que te rompa de placer,
deja que olvide mi mundo,
en tu cuerpo de mujer.