Creyendo en ti
probé un día tus labios
y tu boca besé.
Probé tus sonrisas,
y tu risa pintó mi alegría.
Probé tus miradas
y dibujaste un mundo
en mis ojos para mi.
Juntaste tus manos
con mis manos,
y tus caricias en estado de sitio
mi cuerpo tomaron.
Pasa el tiempo, tu sueño irreal
lleno con mi realidad.
El momento
surge inesperado,
Secreto condicionado.
En el aire flotan los besos
vacíos de tu boca,
agotadas las lágrimas,
ausentes tus miradas.
Hoy despierto de un sueño irreal,
secuestrados los ´principios, engaño
por quien nada sabe de amor.
Querer…no es amar…
dijo el príncipe.
Y la rosa….
se deshizo en la mar.