No hay luz, entre brumas y nieblas me encuentro.
Me quedo en silencio para escuchar algún sonido,
un susurro o un lamento que me oriente el camino.
No huele a nada y nada toco con mis dedos.
Que noche es esta, sin luna, sin estrellas donde no hay brisa,
ni el crujir de hojas secas.
¿Acaso estoy entre tinieblas o muerto?
¿He perdido la razón y mi cordura tantea a ciegas?
Ah, por fin recuerdo, yaciendo y postrado en mí lecho.
Dios mío, es el día de mi último suspiro.
Entonces aquí terminas después de muerto.
Que alguien me responda que nada entiendo
Ahora escucho una voz, es un grito
más que un lamento.
Alguien tira de mí
Por fin una luz y al salir
noto que pierdo el recuerdo.