SALMOS ATEOS
ed34b0082df21c3e81584d04ee44408be273e7d11db117469cf3_640_vientoMientras camino, está el viento.
Mientras pienso, está el viento.
Mientras paso.
Siempre ahí,
sopla en mi cabeza
Parece delicado
cuando alborota despacio mi cabello,
pero su presencia abarca todo,
los cuatro lados del horizonte.
Mi paisaje es el viento.
Cuando me odias,
el aire me acaricia la frente,
llevándose parte de mis recuerdos.
Mientras mi existencia te irrita,
su vuelo está.
Juegas a olvidar.
Estuvo antes que yo,
ha visto más,
mi vida es irrelevante
para el movimiento de la atmósfera,
no me ve,
soy la cara de una hormiga.
Cuando miro a mis hijos,
no ha parado de remover el polvo de la tierra.
Mientras hacíamos el amor,
o cuando miraba el cielo,
seguía lamiendo todo
con la lengua seca.
Las corrientes de aire
pueden envolvernos e ignorarnos a la vez.
Son como la muerte.
Cuando sonrío, olvido su paso,
pero sigue ahí, con su contínuo barrer.
Apática, indiferente, descuidada,
la brisa suave limpia sin mirar.
Es tiempo es el viento.
Cuando muera,
mi cabeza arderá durante un instante
 de su historia infinita y después
se apagará como un fósforo.
Esparcirá mi ceniza sin pensar en mí.
Mientras camino está el viento.
Arroja a mis pies la tierra que arrastra,
la misma que disolverá mi cuerpo.
El viento es el tiempo.
Mientras mi existencia te irrita,
su vuelo está.
Su vuelo es.

Photo by Schaduw Zijde