“Señor, sé muy bien que si tú no eres quien me edifica, en vano me cansaría construyendo, por eso me abandono a tu ímpetu y compasión admirable. Me declaro constructor, haz tu piedra de mi espíritu, porque sólo el que da recibe, y el que construye merece. Y las piedras aún inertes aspiran alcanzar alturas. … Sigue leyendo Renacer desde los escombros
Copia y pega esta URL en tu sitio WordPress para incrustarlo
Copia y pega este código en tu sitio para incrustarlo