Quizás tú necesitas hablar mucho con una persona para conocerla bien. Quizás yo también, sería lo normal. Sin embargo, hay veces que no es una cuestión de cantidad.

Lorena se incorporó a Desafíos Literarios antes de que comenzasen los buenos tiempos. En los primeros meses, nos dimos cuenta de que escribía muy bien y de que ganaba casi todos los concursos. La cosa llegó a preocuparme. ¿Había creado yo una web solo para honrar a Lorena? Nunca ha participado del ruidito continuo de mensajes entre desafiantes, que nos saludamos, nos contamos lo que nos queremos varias veces al día, al tiempo que interpretamos una especie de parte meteorológico en el messenger de Facebook. Lorena nos lee en silencio. Está más centrada que algunos locos como yo.

Quizás le parece que los españoles somos excesivamente cariñosos por darnos tanto apoyo. Sería un error. La culpa no es de todos los españoles. Somos nosotros, los de “Desafíos”, que queremos desarrollar un auténtico espíritu de equipo, y cuando vemos gente tan valiosa en México, Argentina, y otros países, queremos que esa mentalidad se expanda al otro lado del Atlántico sin diferenciarnos por coordenadas.

Pero ese no es el tema. Yo hablo de ella, de Lorena. Que escribe muy bien. Es independiente, inteligente, culta, con personalidad, y con la cabeza organizada en lo que a ideas se refiere.Realmente sé que es muy cálida. Acepto su manera de ser y su independencia en cualquier caso, pero gustándome tanto su escritura, todavía más. Su relatos siempre nos muestran un final impactante. Tienen una raigambre local muy clara pero no se conforma con eso, ya que aporta un estilo propio muy vigoroso y un punto de vista moderno, y avanzado. Yo recomiendo sus relatos sin ningun tipo de reserva mental, porque, sencillamente, son muy buenos.

En fin, ¿qué le vamos a preguntar a Lorena? Léelo aquí y conócela un poco más.

Defínete si te atreves.

mmm…Soy una mujer como cualquier otra, con altas y bajas, logros y frustraciones, defectos y virtudes. Me afecta en gran medida el dolor y la injusticia. Con esta última tiendo a llegar incluso a la ira. Tengo muy pocos amigos y una gran familia que me da motivos para vivir.

Cuando vives una situación que plasmas en tus letras ¿Te dejas llevar por ella fuera de la mesa de trabajo, afectando tu vida personal?

Me parece que es lo contrario. Es la vida la que me lleva a escribir. Todo lo que escribo tiene que ver con algún momento, alguna experiencia, algo que he visto o escuchado. Es lo que he vivido y que de alguna manera me ha afectado, lo que plasmo en mis textos.

¿Te documentas en la lectura, en viajes, escuchando historias de la vida real o simplemente recoges los datos que te dicta tu fértil imaginación?

Estoy convencida de que cada lectura, cada viaje, cada experiencia de la vida real pueden despertar  en mi mente inquietudes viables para plasmar en un texto. No es que sea una autobiogría todo lo que escribo, sino que toda experiencia es susceptible de generar una historia. Desde luego esto no quiere decir que toda experiencia merezca ser contada, ahí es donde interviene la imaginación.

¿Te preocupa lo que pensarán tus seres queridos de las historias rocambolescas que puedes parir en tus momentos de locura creativa?

No. Por lo contrario, me gusta cuando alguien me externa su sorpresa o emoción. Mi nieta mayor, es una lectora crítica de mis textos: “Qué locura es ésta”, me dijo alguna vez.

¿Crees que crear literatura es el resultado de algún problema afectivo o de un desbarajuste genético?

Ni lo uno ni lo otro. Me parece que es una necesidad de comunicación que surge entre personas normales que hemos leído y vivido con intensidad. Es una semilla que crece y fructifica con las experiencias lectoras y de la vida diaria, abonada por aquellas situaciones que conmueven el ánimo de cualquiera.

¿Qué es exactamente lo que te hizo querer comunicarte escribiendo?

Las historias que se callan. Las emociones y sentimientos que se ocultan de una u otra manera entre  gente común.

¿Eres metódico o te dejas llevar a la hora de escribir?

Soy fatalmente asistemática. Puedo dejar de escribir durante días y de pronto sentarme por horas, sin sentir el paso del tiempo. Admiro a esos grandes escritores que hicieron de la escritura una forma de vida; una actividad perfectamente planeada. Yo no he sido capaz de lograrlo.

¿Tienes algún tabú o algo sobre lo que jamás escribirías?

Sí. Jamás escribiría historias reales que me han sido confiadas en momentos críticos y que serían dignas de ser contadas. No escribo sin autorización.

¿Cómo conociste desafíosliterarios.com y qué es lo que te hizo querer formar parte?

Mi hermana me habló del grupo. Las dos escribimos desde hace tiempo. Ella estaba involucrada en desafiosliterarios.com y me invito a sumarme. Me agradó la apertura y sensibilidad de la gente. El tino y desinterés con que se ha dirigido y el foro que representa para dar a conocer lo que escribo.

¿Qué es lo qué menos te gusta del mundo del escritor?

Intentar que te publiquen. Sé que existen muchos medios pero me parece tedioso y complicado.

 

¿Cuál es la razón que te llevó a mostrar tus escritos? Dime un libro, un personaje y un autor que formen parte importante de tu vida.

El interés por dar a conocer historias que me han conmovido de una u otra manera y de las que poco se habla.

Son muchas las obras que han influido en mi vida y en mi forma de escribir. Pero hay una en especial que me dejó honda huella: El cuarteto de Alejandría de Durell me abrió los ojos respecto a la diversidad de percepciones sobre una misma realidad. Clea en la misma obra me impactó por su pasión y entrega. Esta tetralogía me ayudó  a ser más tolerante.

De pequeño soñabas con ser…

Un ave. Sí. Soñaba con volar y poder ver el mundo desde lo alto. Luego mis sueños fueron más terrenales. Soñé con ser agricultora y poder obtener de la tierra la belleza de las flores; después soñé con ser maestra. Esto último lo viví casi toda mi vida profesional.

Dime un lugar del mundo donde te gustaría escaparte y encerrarte a escribir.

Un bosque con un gran lago en cualquier lugar del mundo o una playa solitaria de suave arena.

¿Tienes algún truco para burlar el mal de la página en blanco?

Suelo platicar con la gente. Le pido que me cuenten historias de sus vidas para derivar en un cuento.

 

¿Qué novela famosa te hubiese gustado escribir tú y no su autor?

Las Palmeras salvajes de Wiliam Faukner. Casi nada, ¿verdad?

? ¿Crees que todo escritor es un enfermo de vanidad, o de soledad?

No lo creo. Me parece que la vanidad es un producto del mal manejo que llegan a hacer los medios. La soledad es una necesidad para el escritor en sus momentos de inspiración, de ninguna manera es una enfermedad.

¿Qué prefieres? ¿Ser un escritor que tenga un importante éxito póstumo o ganar hoy el dinero con libros bestseller tipo Kleen-ex?

Sin dudarlo, preferiría tener un éxito importante póstumo. Sería un reconocimiento a la obra.

¿Te pertenecen todas las frases que has escrito o sientes que has copiado un poco alguna vez?

Las lecturas siempre dejan huella en el lector. Cuando escribo no puedo hacer un lado todo aquello que se ha almacenado en mi mente. Conscientemente no creo haber copiado pero, sin duda, al escribir el bagaje que se lleva influye en el cómo y qué escribo.

¿Te gusta el momento literario actual? ¿Por qué?

Sí. Las tecnologías nos acercan a nuevos escritores. El desarrollo de la ciencia, la distintas ideologías, las diferentes cosmovisiones ofrecen una pluralidad de temas y enfoques que enriquecen la vida humana. Lo difícil es aprender a discriminar qué  conviene leer.

¿Cómo lleva la gente de tu entorno, la que te conoce bien, tu faceta de escritor?

Con naturalidad. Sigo siendo la misma. Con el mismo buen o mal carácter, con el mismo amor por la gente cercana y el mismo entusiasmo por lo que hago.

¿Cómo te ha enriquecido o cambiado esta faceta de escritor?

Escribir es una parte complementaria del proceso de lectura que me ha permitido dar concreción a pensamientos, ideas, emociones y sentimientos contenidos. Me ha dado una perspectiva diferente del mundo y de la vida al tiempo de compartirla con otros.

22.¿Cuáles son tus proyectos como escritora?

Tengo en mente dar concreción a dos libros de cuentos y terminar una novela que lleva años en proceso.