Perdices hoy yo he visto entre matojos
y a sapos y a culebras en campiña,
mas nunca he visto a Dios, que abrí los ojos,
mirando me caí, ¡cielos!, de hinojos
de un pino al tropezar con una piña.

Y he visto a mercachifles, malandrines,
fingiendo pues pasaban por ser santos,
mas nunca he visto a Dios ni en los maitines,
si acaso me he topado con pasquines,

penando con sus duelos y quebrantos.
Pues voy llenando el tiempo poco a poco
cuidando de poner la pierna alterna,
a veces meditando, haciendo el loco,

cuidando no quemar con lo que toco
mas nunca he visto a Dios ni en la taberna.
Del día en que tomé leche materna
hasta hoy en que, maduro, peino canas,

me fijo cuando tiro en la cisterna,
mas nunca yo le vi ni con linterna
de día por la noche o en las mañanas.
Y sigo, aunque ya ignoro si merezca

que voy buscando a Dios con la esperanza
que un día de repente se aparezca,,
me diga una palabra y desvanezca
y pídame perdón por la tardanza.
©donaciano bueno
(… y sus poemas de medio pelo)
http://www.donacianobueno.com/