Pues yo soy agente secreto. Siempre que lo cuento me contestan lo mismo. ¡Pero hombre, no lo digas! Si no, ¿cómo vas a ser secreto? Ya, bueno, es que lo de ser agente secreto, es una tocada de narices. Si no lo dices, porque no lo dices, si lo dices, pues eso… Uno puede inventarse…
Mi viaje a Inglaterra 1
