Abrió los ojos, solo la oscuridad le acompañaba. Sus pupilas se adaptaron y a los segundos percibió una luz extremadamente débil que se colaba por una fisura lateral que demarcaba una línea delgada, casi que perfecta. Respiró hondo, un aroma que nunca antes había sentido le inundó los pulmones. Quiso moverse, pero sus extremidades estaban inmovilizadas. Trató de incorporarse, más un fuerte tirón en el cuello se lo impidió. Intentó hablar, sin embargo sus labios no se despegaban. Entonces su mente viajó hacia ese último recuerdo en el que su mundo murió, ese instante en que se desmoronó en el suelo luego de probar ese champán que de sorpresa había encontrado en su habitación. Entendió todo y concibió su nueva y mortal realidad. No cayó en la desesperación, no habría razón. Al fin, ella lo había encontrado; después de tantos años y de tanto daño, consumaba su venganza. No sintió arrepentimiento, quiso sonreír al escuchar caer las primeras paladas que sellarían su última morada.
Sobre el Autor
Augusto I
Siempre he deseado realizarme como escritor. Redacté mis primeros cuentos a la edad de 16 años y me atreví a escribir mi primera novela a los 18, sin embargo, con todos esos trabajos de adolescencia y juventud, no he hecho más que mantenerlos en reserva, por diversas circunstancias. Con el pasar de los años he trabajado en diversos relatos y otros intentos de novela. También he participado en concursos literarios nacionales, tanto en novela como en cuento y relatos. En 2011 participé en el Concurso Ricardo Miró, el más importante de Panamá, con una colección de cuentos de temática variada y bastante oscura, logrando que uno de los miembros del jurado resaltara mi esfuerzo y me empujara a trabajar y mejorar. En adición, produzco variados relatos y textos sueltos de temática suspense, terror, prosa poética e intriga; que publico en plataformas libres. También, mantengo un proyecto de novela breve titulada Primordiales, recién concluida y en revisión, en las plataformas Me Gusta Escribir, Inkspired y Wattpad. Como todo aspirante a ser escritor publicado, hay más trabajo en reserva del que se puede o debe enumerar en una nota biográfica. Aunque estimo que no he hecho los esfuerzos necesarios o suficientes para lograr ser un escritor publicado, no me he detenido, y considero que cada vez estoy más cerca de lograrlo. Ofrezco mi talento a consideración de todos ustedes.
Artículos Relacionados
Acceder
Por favor, accede al sitio.