SOLEDAD

Dejaré que te acune,
en sus brazos azules
la mañana,
que la tarde te traiga,
peregrina de amor
su último beso.

Dejaré…..
que el olvido se vaya,
por la noche del tiempo
a buscar tu sonrisa
en cualquier almohada,
dejaré, que mis manos
abandonen tu cuerpo.

Si tu risa y la mía
ya no beben la escarcha,
que ha dejado el rocío
en la dulce azucena
que buscaba el estío,
dejaré que te vayas….
soledad,
caminito del río
y que vuelvas, descalza
a dormirte conmigo,
sobre el témpano frío
de una antigua distancia.

Lola Franco