Hace tiempo que Almudena de la Fuente, mi amiga y gran hacedora de sonetos, solía retar a un juego a quien se decidiese a hacerlo. En una de estas ocasiones el juego fue el siguiente:

RETO EN SONETO
(Autora Almudena de la Fuente)

Espero caballero su soneto,
recuerde que ha aceptado el desafío,
no tiemble por favor que no hace frío,
que bien lo trataré se lo prometo.

Es bueno que revise el alfabeto
también el diccionario que le envío
no quiero que pretexte algún resfrío
y escape sin armarme ni un cuarteto.

Yo soy dama española gitana
y si algo yo aprendí en mi corta vida,
ha sido defender mi gran honor,

mi verso y mi palabra castellana
filosa como espada es muy temida
no tiemble por favor… tenga valor.

ACEPTO EL RETO
(Autor Pedro Lamart)

No se engañe. Confieso que he temblado,
pero mi tiritar no es por el frío:
me encanta su atrevido desafío
y lo hago por estar emocionado.

No quiero un diccionario suyo fiado,
ni fingir un ridículo resfrío,
pues en mi habilidad siempre confío
y jamás de los retos he escapado.

Para mí nunca la etnia fue importante,
ya pueda ser gitana o castellana,
basta que sea moza muy española.

Así que no me sea petulante
y baje de tan cándida peana,
que si usted usa espada, yo… ¡Pistola!